Alfonso
La crisis que se le viene a México
Acabo de leer el más reciente libro del presidente mexicano, Andrés López (AMLO) "Hacia una Economía Moral". En él confirma su filosofía socialista-comunista.
Paralelamente, fue designada de manera ilegal Rosario Piedra como Ombudsman, para defender los derechos humanos en México. La designación fue irregular y ha generado el reclamo de algunos medios de comunicación, líderes de opinión, gobernadores, alcaldes y la ONU.
Tanto en su libro como en sus acciones, AMLO es consistente con lo que los líderes populistas hacen: eliminar contrapesos institucionales para concentrar el poder. En países con democracias consolidadas, como Estados Unidos, un intento de abuso de poder puede llevar a su presidente a un juicio político. Eso sucede actualmente al presidente Donald Trump.

No es el caso de México. Se trata de una democracia joven que apenas sustituyó una larga historia de caudillos y autoritarismo; por lo que eliminar instituciones ha resultado relativamente sencillo. La Comisión de los Derechos Humanos era, junto con el Banco de México y el Instituto Nacional Electoral (INE), los contrapesos restantes que tiene AMLO. El INE es fundamental, pues es la institución que cuenta los votos.
Cuando terminan por apoderarse de las instituciones, los populistas no tienen impedimentos para lo que Carlos Marx y Federico Engels (citados en el libro de AMLO, página 173) llamaban "la Fase I" del Manifiesto Comunista, que consiste en erradicar la propiedad privada, socavar la libertad, controlar el crédito (AMLO le llama Banco del Bienestar) y aumentar la participación del gobierno en la economía. Según Marx, el hombre en la "Fase II" vive en felicidad total porque se encuentra en una comunidad en la que no tiene necesidad de ser egoísta. A esto se refiere AMLO con "república amorosa".
Me resulta incomprensible que en pleno siglo XXI, un presidente electo democráticamente escriba un libro donde explica cómo aplicará ideas socialistas. No tengo la menor duda de que no es un plan por sólo seis años. Sin contrapesos, ¿qué le impide a AMLO quedarse más tiempo?
¿Qué sigue?
México vive -en mi opinión- el momento más crítico en su breve historia democrática. Estamos viendo sólo la punta del iceberg.
Marx y Engels son los grandes perdedores en la historia de la política económica. Y sin embargo, México tiene a un presidente que tiene toda la intención de aplicar su modelo. Los mexicanos deben ser capaces de detener el ataque que vendrá sobre el INE y demandar legalidad en la toma de la CNDH. De lo contrario, no podrán quejarse de la crisis económica y política que le seguirá.